LA IZQUIERDA QUISO ANULAR ILEGALMENTE LOS RESULTADOS DE LAS ELECCIONES DE 1933
"Nada menos que tres golpes de Estado se me aconsejaron en 20 días [por las izquierdas republicanas]. El primero a cargo de Botella, el ministro de Justicia, quien propuso la firma de un decreto anulando las elecciones hechas. Inmediatamente después propuso Gordón Ordás, ministro de Industria, que yo disolviese las nuevas Cortes. Pocos días más tarde Azaña, Casares y Marcelino Domingo dirigieron a Martínez Barrio, presidente del Consejo, una carta de tenaz y fuerte apremio en la que el llamamiento tácito a la solidaridad masónica se transparentaba clarísimo".
Alcalá-Zamora, Niceto: Memorias
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Un defecto hispano muy tipico: el no saber perder. Ni socialistas ni republicanos supimos perder y esperar cuando fue necesario. Y por no saber perder y esperar a tiempo lo hemos perdido todo."(Carta de Sánchez Albornoz a Luis Araquistain, Burdeos 27 de mayo de 1939)
Posiblemente a raíz del resultado de las elecciones de noviembre-diciembre de 1933
MANUEL AZAÑA. 11 DE FEBRERO DE 1934 EN EL CINE PARDIÑAS DE MADRID
[...[Pues bien, señores, yo afirmo, y lo someto a la consideración de los republicanos y a su aprobación, que, producida la crisis ministerial, caído este Gobierno, los elementos de la CEDA y los agrarios no tienen títulos políticos para ocupar el poder, aunque tengan número en el Parlamento para sostenerse. Esto no se había dicho aún. ¡Pues ya es hora de decirlo! (Aplausos). No basta tener número en el Parlamento. Nosotros hemos sostenido- yo lo acabo de decir en este discurso- que admitimos perfectamente en la República, digámoslo así, dos velocidades en la política: una, más rápida, más acelerada, y otra, de contención, de moderación. Nosotros no expulsamos a nadie de la República[...]
Nosotros no repelemos a nadie ni expulsamos a nadie de la República que en ella haya entrado, ni negamos la entrada a quien pretenda penetrar; pero una cosa es ingresar en la República y otra cosa es gobernar la República. Para gobernar la República hace falta tener en el Parlamento, puesto que en régimen parlamentario estamos, un número suficiente de diputados que pueda mantener un Gobierno; pero esos diputados tienen que haber salido de las urnas con un signo republicano, con un programa republicano y una bandera republicana, diciendo que son republicanos. [...]
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